El viernes pasado, día 2 de marzo, Lakasa fue protagonista de la reseña semanal que elabora el crítico gastronómico Luís Cepeda en el suplemento On Madrid que publica el diario El País.
Para los que no la conozcais, On Madrid se define como una guía que se distribuye los viernes en la edición de Madrid y da todas las pistas para disfrutar del ocio y los espectáculos de la capital.
Según la OJD (Oficina de la justificación de la Difusión) el diario posee en la actualidad un promedio de difusión de 366.707 ejemplares con un promedio de tirada de 473.905 ejemplares. Datos que dan a entender la importancia y el alcance de su repercusión.
El autor de la crítica es Luís Cepeda, un periodista veterano en el campo de la gastronomía. Aquí os dejamos la reseña en su integridad:
El desafío y la madurez de un joven chef madrileño se ubican en un esquinazo urbano con personalidad propia.
Los cocineros llevan la contraria a la crisis. Puede que no la derroten, pero le hacen la lucha, aportan ilusión y estimulan el apetito; todo muy positivo. César Martín es un campeón en eso. Ha despachado entusiasmo y oficio por casi toda la geografía ciudadana, desde el Arce, de Chueca, al Balzac, de Los Jerónimos; de la Abacería de la Villa, del barrio Salamanca, a este Lakasa, de Chamberí, donde acaba de instalarse.
Está en una esquina redondeada de Alenza, a la sombra del histórico y aparatoso hospital de Jornaleros. Su configuración semicircular de grandes ventanales, con las aceras a la altura de la mirada, transmite al lugar sensaciones de brasserie.
Lo reitera detrás un bar de mostrador duplicado y su breve carta de insólitas pizzas (con mojo canario, paloma torcaz o ibérico ahumado) o sabrosas raciones (cecina, buñuelos de Idiazábal o setas con yema), para ágapes urgentes. En las mesas de mantelitos tejidos hay guiños al sabor francés con los mejillones de roca encebollados estilo Mont Saint Michelle (12,5 €), la ensalada con aliño de Dijon ( 10 €), la raya desespinada al vino tinto (16 €), con su cartílago crujiente, o unas alcachofas a la brasa de sugerencia puntual, a las que el foie no estorba. Perseverante en su pericia italiana, César propone, además de las pizzas, unos tagliatelli con torreznos (9,5 €) e, inspirado en la caza, el carpaccio (12,5 €) o las albóndigas (15 €) de ciervo, arroz con pato azulón (15,5 €) y pichón en su guiso (28,5 €). A las brasas, hamburguesa de ternera a cuchillo (14,5 €) y chuletón fileteado (25,5 €).